Empecé a bucear hace siete años. Y mi entrada en el mundo submarino fue totalmente casual, un cúmulo de circunstancias que rodeaba a mi círculo de amigos me empujó a aprender a bucear. Al principio fue como una pesadilla, no me sentía nada cómoda en el agua y me sentía muy patosa.
Pero como yo siempre digo, el tiempo lo pone todo en su sitio. Y ya veis, a mí me puso bajo el mar, que es el sitio que más me gusta.
No puedo explicar lo que siento cuando estoy bajo el agua, cada inmersión aporta algo nuevo. La sensación de volar gracias a la ingravidez del agua, el estar un rato conmigo misma, el contemplar las maravillas del mundo submarino, ver miles de peces, explorar un barco hundido… No hay adjetivos para describir cómo es, hay que sentirlo.
Después de unos cientos de inmersiones y comprobar que el buceo me apasiona decidí dedicarme a ello profesionalmente, enseñando a los demás a bucear respetando el frágil entorno subacuático e intentando transmitir lo que el mar me hace sentir.
Si aún no lo has probado, ¡adelante! Descubrirás un mundo nuevo y sorprendente lleno de sensaciones.
Modelos de la foto: Marina y Carlos
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1 comentario:
Hola Isa!! Que pasada de Blog!! me encanta la sensibilidad que demuestras en cada una de tus palabras...
Y por cierto!! Me encantaria probar el buceo...siempre lo he comentado con mi cuñado...ya me contaras como podriamos hacerlo!!
Un besote!
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